Pues resulta que tengo un blog. ¡Y yo sin enterarme! Tremendo, estoy más enganchado de lo que creía al mundo moderno. Dentro de poco, incluso haré compras por internet.
Todo un mundo este de los blogs. Aunque no creo que siga. Ya tengo un espacio (Recuerdos de mañana) que hace las funciones de este blog, y me he acabado encariñando con él. Joder, es que soy un romántico incurable. Así me va, que no consigo novia ni a la de tres.
En fin, al menos puedo meter comentarios en los blogs que visito, como el de Rafael Reig, que está bastante bien. En fin, que no sé si nos volveremos a ver por aquí. Un abrazo para todos.
miércoles, 12 de septiembre de 2007
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